Este blog es ficticio, cualquier parecido con la realidad será producto de su imaginación. Y recomendamos que no siga la lectura en ese caso.

domingo, 26 de diciembre de 2010

wtf?

Sacudimento extraño que aturde las ides, accesos de alegría, impulsos de llorar. He aquí la locura femenina.
Siendo que no creo en la astrología y esa vana ilusión-explicación que es el horóscopo, tengo que darle la razón hoy. Pero me dice cosas que yo ya sabía, y que se aplican a cualquier situación. Me dijo algo así como que no me cree falsas esperanzas, que a veces las personas dicen cosas sin medir las consecuencias. Y en eso estaba pensando hoy, que lo más probable es que haya malinterpretado muchas cosas y piense ahora que es un hecho, algo que realmente se creó en mi imaginación.
Pero ¿cómo frenar la imaginación? ¿Cómo hago para no ilusionarme y buscar agua en un desierto? Soy así,lo lamento, me hago una torta con unas migas de harina. Veo cosas que no están, y no veo muchas obviedades.
A veces tengo el autoestima de ver todo a mi favor, y otras la depresiva manía de no creer en cosas buenas.
No diferencio cuál es la real, es imposible ser objetiva en aspectos sentimentales, o de las relaciones humanas mejor dicho.
No sé si estoy teniendo razón ahora, en mi momento de romper el castillo de arena. O sí el castillo tenía buenos cimientos y no los vi.
La mejor forma de aclarar ciertas situaciones es tener paciencia (¡qué palabra!), digamos que la mía esta en mode off.
Es blanco o es negro, es bueno o es malo, no me conformo con un más o menos.
Tengo que parar de pensar, es imposible, pero me refiero a pensar en otras cosas. Hay que manejar la paciencia, crearla del vacío por lo menos.
No hablar tanto y escuchar un poco más.
No pensar tanto y hacer un poco más. No. No hacer tanto y pensar un poco más.
Pero pensar en forma productiva, no como ahora, no son buenas las obsesiones, si es que llega a eso. Lo que tengo que medir es que hago y que no. Seguir con mi maldita costumbre de que quede todo como está. No hacer nada por no cambiar nada.
No puedo jugar a probar, no con cualquiera. O tal vez, con cualquiera sí, con algunos particularmente no.
El tema es que las situaciones se repiten, no es la primera vez que tengo estos complejos por alguien. Y no me gusta la solución que apliqué siempre. No me quejo de resultados, sino que al no conocer otros me intrigan las probabilidades de ellos.

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