Semana de la dulzura

Y yo me pregunto: ¿qué tiene de dulce?
Mi situación muy agradable que digamos no es. Hace 10 días que suspendieron las clases, o sea que no veo ni a mis compañeros de facultad, que bien o mal entretienen. Algunos hasta son interesantes...
Sumado a esto me cierran los boliches, y bueno esto tiene sus consecuencias. Por empezar no hay baile, no hay trabajo, y la reputisimisima. Y por otro lado, no hay baile, no hay boliche y no había facultad (recuerden), ¿dónde cruzo al flaco ese que tengo en mi mente?, o a cualquier otro sea el caso.
Aparte, al no tener ocupación, ni estudio, ni salidas, trabajo; me la paso encerrada en mi casa como una ermitaña! y esto así no va.
Voy a salir sí, pero mi salida va a ser, una caminata a la siesta para bajar estos kilos que vengo acumulando como un novillo de firlot (que mierda sé yo como se escribe).
Voy a caminar, hacer ejercicio es saludable, pienso en el lado de liberar endorfinas y mejorar el humor. Teniendo en cuenta que hace rato que no hay otro tipo de ejercicio... va a ser faborable mejorar mi humor con algo.
Ya sé a esta altura para levantar mi humor hace falta un crique, pero vamos a ponerle fuerza a la situación y algo va a salir.
Aparte hay planes de amigas, finde con amigas. Sin darme cuenta que mi cuerpo mas que una amiga necesita un hombre.
Pero no sé, eso pienso porque miro a alguien, pero capaz no sea tan así.
Capaz sola estoy mejor, vamos a demostrarlo.
Bueno, me voy a ver la novela, a llenar de historias falsas pero felices, mi alma.